Cum dederit dilectis suis sommum.
Ecce, haereditas Dominii filii: merces fructus ventris
Dioles, pues, a sus elegidos el sueño
Así, la herencia del Señor, el fruto de su vientre, sus hijos lo recompensarán
Cuando escucho esta música tengo ganas de sangrar
Lo siento
No puedo evitar ponerme de parte de los más débiles
Es una enfermedad
Es como un cancer
Es que quiero consumirme
Y llevarme a todos por delante cuando lo haga
Porque no existe mayor crítica que el hambre y la marginación ya que es una denuncia explícita en sí, es como si al verlo de diesen una bofetada sólo por tener el valor de observar
Y a mí sólo se me ocurre protestar
Porque es lo único que se hacer, dar por culo
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