lunes, 12 de enero de 2009

De profundis

Esta tarde caminaba por la calle
Y me he dado cuenta de que mis piernas caminaban más rápido
Más rápido que yo
Iban por delante
Mis torso iba como medio centímetro por detrás
Como dejándose arrastras
Como si las piernas lo condujesen a un risco
Y de repente he sentido ganas de que mis cabeza, mi pecho y mi pelvis fuesen por delante
Y echarme a correr y arrollar a todo el mundo
Derribar al mayor número de gente posible
Pero sin detenerme
Chocar y chocar
Como si todo el mundo necesitara un manotazo

Digo esto mientras escucho a Bach, cuarto movimiento (zarabanda) de la segunda suite de chelo
Cuando me ha sucedido esto escuchaba a Bach
Y sentía eso

Y luego he pensado en la profundidad
Y en todos esos seres profundos
Y en todo lo que detesto su profundidad
Como se aislan del mundo para untarse los unos con los otros con la mermelada de su inteligencia
Sobrecargada de onanista y exhibicionista edulcorante
Como hablan de sus pensamientos profundos
Y tienen sus charlas y coloquios inteligentes de los que no puedo evitar excluirme en aras de no regurgitar cerveza sobre sus discursos
Cuanto aborrezco sus masturbaciones emocionales y lo a gusto que están imbuidos en ellas
La superioridad que sienten por dedicarse a la cultura
Cuando el criterio ético de su creación poética no abarca más alla del "Ella me ha dejado"
Sólo saben lloriquear y regodearse en creer que hacen algo importante
Cuando sus putas pajas sentimentales no contribuyen a nada
Y su inteligencia superior no favorece a nadie
Pero ellos son artistas
Son gente especial
Aunque no favorezcan a nadie
Sólo a sí mismos, a sus ínfulas y engreimiento
Y me jode ver que no sirven para nada
Y me jode ver que lo que yo hago tampoco sirve para nada
Dos fracasos distintos siguen siendo un fracaso estrepitoso de lo humano

No hay comentarios: